El sábado pasado, un avión despegaba en dirección Frankfurt con 29 alumnas y alumnos de nuestro colegio. En plena noche fueron recibidos por las familias de acogida. La acogida fue muy cálida, lo cual vino muy bien, porque las alumnas y los alumnos se dieron cuenta en seguida del frío que puede hacer en Alemania. La mañana siguiente pudieron dormir hasta tarde para recuperar el sueño y por la tarde, bajo un sol muy agradable, nos vimos todos en Kirchhain. Allí nos recibió el alcalde de la ciudad en el antiguo e histórico ayuntamiento. Pudimos incluso firmar en el libro de visitantes de la ciudad. Tras la bienvenida, nos guio por la ciudad durante más o menos una hora, contándonos las historias más interesantes e importantes de Kirchhain. Después de esta maravillosa acogida, disfrutamos de un helado en la plaza del mercado.
El lunes, instrumentos en mano, empezamos el primer ensayo en el salón de actos del colegio de Kirchhain. El director, Herr Bosse, nos trajo incluso un pequeño regalo de bienvenida y dejó claro lo mucho que se alegraba de recibir a sus “viejos amigos” de Tenerife.
Lamentablemente la excursión a la ópera de Kassel no salió como fue prevista, ya que la “Deutsche Bahn” no acompañó ese día. A la ida, retraso de 3 horas, lo cual conllevó la cancelación de la tarde de compras, planeada para antes de la ópera, a la cual llegamos algo tarde. Por suerte pudimos disfrutar igualmente de gran parte de la obra. El teatro, la música, el talento de los cantantes y de la orquesta nos dejó maravillados. De hecho, la primera parte la vimos desde las butacas, pero la segunda parte pudimos disfrutarla desde el escenario, ya que habían dispuesto sillas dentro del set-up.
A la vuelta, la “Deutsche Bahn” volvió a hacer de las suyas ya que hubo un problema técnico por el cual estuvimos 1 hora y media parados en el tren a tan solo unos kilómetros de Kirchhain. Lo cierto es que, aún así, los 100 alumnos y alumnas y los acompañantes no perdieron el ánimo y se tomaron la situación con humor, lo cual hizo que fuese más llevadero. Una vez llegamos a la estación, los padres y las madres de las familias de acogida recogieron a los alumnos y las alumnas y todos llegaron bien a casa. Este día desde luego que no lo olvida nadie.
Tras nuestra gran experiencia, el martes empezamos el ensayo algo más tarde. Las horas extra de sueño fueron muy efectivas, ya que la banda ensayó de maravilla durante 4 horas. Algunos niños y algunas niñas dieron un paseo con la Señora González por la ciudad y después todos se fueron a casa para disfrutar de la tarde con un tiempo estupendo.
Continuará…